En pleno centro histórico de Salamanca, a unos pasos de la Plaza Mayor está situada la Casa de las Muertes, "la más bella de las platerescas viviendas hidalgas salmantinas", en opinión del escritor Julián Alvárez Villar, vertida en su libro titulado: "La Casa de las Muertes, leyenda e Historia".
Conocemos este peculiar edificio salmantino de la mano de uno de sus propietarios, Luis Gonzaga Blanco Cobaleda, que amablemente nos muestra la parte social de esta vivienda. En 1962 la compró su padre, Matías Blanco Cobaleda Rodríguez Vega, hijo del que fuera fundador del banco Matias Blanco Cobaleda y posteriormente propietario del Banco Salamanca y Banco de Castilla.
Blanco Cobaleda, adquirió el inmueble vaciando el interior, consolidando con una estructura metálica y recuperando la identidad del mismo, con la recuperación de elementos que forman parte de la identidad de este edificio, como es el caso de las calaveras o muertes de la fachada, que dan nombre al edificio.
Hoy el edificio, casa familiar en Salamanca de los hermanos Cobaleda Blanco, está en venta por tres millones de euros, un precio módico, en opinión de su propietario Luis Gonzága, que lo divide por metro cuadrado para compararlo al de las viviendas sociales. Una oportunidad de oro para quien pueda permitirse el lujo de darse el capricho de tener un palacete en pleno centro de Salamanca, con incluso un amplio jardín particular y piscina.
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